domingo, 20 de junio de 2010

¡Adiós a otra historia!

Abrí la puerta y me sentí liberada. Mi pulso perdió velocidad, mi respiración se calmó. Me detuve en la acera y noté cómo el pánico cedía, pero volvió a dispararse cuándo pensé: "Dios, ¿tan mal estoy que no puedo estar ni con mi propia hermana? Y ahora tengo que regresar a mi apartamento vacío".

Vaya palo. No podía estar con gente pero no quería estar sola. De repente, mi visión se amplió y me encontré en medio del espacio, observando el mundo. Podía ver a millones y millones de personas, cada una dirigiendo su vida.
Luego pude verme a mí. Había perdido mi lugar en el universo.
Se habían cerrado las puertas y
me habían dejado fuera.

Estaba más perdida de lo que creía que podía estar un ser humano.


Esto es un fragmento de "¿Hay alguien ahí fuera?" de Marian Keyes, gran narradora en mi opinión. El libro me ha encantado. Quizás no es uno de aquellos libros que te marcan profundamente, el libro al que recuerdas el resto de tu vida cuándo te preguntan por tu preferido. Pero, definitivamente, me ha gustado.
Es una de aquellas historias cotidianas y muy reales en las que te sientes muy pero que muy cómoda, realmente como si fuera una vida paralela a la tuya, una historia a la que sólo tú tienes acceso al abrir esas páginas llenas de ironía, perspicacia y sentido del humor.
Y ahora me da pena. Muuucha pena. Sí, ahora siento eso que se siente justo cuando acabas de terminar un libro largo que casi formaba parte de tu día a día. ¿Y ahora qué? ¿Cómo seguirá la vida de mis queridos personajes?
Pues ale, tendré que imaginármela. Y si no, tendré que conseguir otro libro ya, otro libro que consiga adentrarme en su historia, un nuevo mundo con nuevos personajes y experiencias que conocer...

viernes, 18 de junio de 2010

Injusticias


De pronto, el chico cerró los ojos, llorando de rabia, sin una pizca de esperanza. Yo debía hacerme el fuerte, para intentar hacerle creer que todo pasaría, que no estaba tan mal. Debía ser fuerte ni que fuera tan solo para animarle... Pero no podía, era incapaz de contener esas lágrimas que recorrían mis mejillas, con destino a sus débiles y temblorosas manos.


Ya no quedaba nadie por la calle. Sólo nos acompañaba el rumor de los eucaliptos y la intensa luz de la luna, que empalidecía aún más el rostro de aquel pobre niño inocente.
Yo quería ayudarle, pero algo en mi interior me decía que lo mejor sería dejarle morir. No tenía casa, no tenía familia, sólo se tenía a él mismo y a su inoportuna enfermedad.


Por un momento deseé intercambiarme los papeles con él. Ser yo el enfermo, y él un niño libre y feliz. ¿Por qué él? ¿Por qué él, que le quedaba tanta vida por vivir, tantas experiencias, momentos y sentimientos que experimentar? ¿Por qué?


La naturaleza es a veces tan injusta... Pero el destino dijo que le había tocado a él, y yo no podía hacer nada por modificarlo. Entre llantos y silencios nos dormimos, bajo aquel despiadado frío de enero, yo envuelto por la incertidumbre y la rabia, él por la muerte que finalmente le arrebató la vida...

sábado, 12 de junio de 2010


He aprendido a amar los secretos.
Parecen ser lo único capaz de prestarle cierto misterio o fantasía a la vida moderna.
Lo más banal resulta delicioso con sólo esconderlo.




viernes, 11 de junio de 2010

Desorden en mi cabeza


Necesito encontrar respuestas. Necesito saber el porqué de todo, y sin embargo nadie ni nada me da las respuestas.

No quiero seguir adelante ni volver atrás. No. No me gusta nada mi camino hecho hasta ahora y no tengo fuerzas para buscar otro de nuevo, o una desviación, un atajo que consiga hacer más placentero este largo viaje.

No quiero seguir, no quiero avanzar. ¡Quiero que todo se detenga!

Por un momento, no tener que pensar en nada... Por un momento, desvanecerme, desaparecer...

Desaparecer.

domingo, 6 de junio de 2010

Ella quería volar alto, muy alto;
perderse entre las nubes de tu corazón...Y

Cada día cuenta


Sentir que debes aprovechar cada segundo de tu vida, incluso en esos días que no tienen nada de especial. Porque es tu única oportunidad, porque nada de lo que haces podrás repetirlo ni cambiarlo, nunca podrás volver atrás.
Sentir que no debes dejar que la vida pase sin importancia, sin pensar que tiene su fin y ningún otro comienzo.

Porque cada minuto que pasa es uno menos de tu vida, y te das cuenta que los echas a perder continuamente. Intenta vivir al máximo todos los pequeños detalles que por ahora son insignificantes pero que más adelante serán decisivos.
No pienses que hoy es un día cualquiera, porque cada día cuenta y cada día, por monótono y corriente que parezca, es especial. Porque es un día más en tu vida, un día único que nunca podrás vivir de nuevo.

Haz que cada momento cuente. Vive intensamente cada uno de tus días, porque más adelante no tendrás la oportunidad de hacerlo. Y piensa que cada detalle está construyendo tu día a día. Solamente tú decides cómo.
Vive los días como si hoy fuera el último, porque mañana es inseguro, el ayer no te pertenece y solamente el hoy es tuyo. Entonces sabrás lo que es vivir.
Y recuerda: HOY es un día único, nunca más volverá a repetirse.

viernes, 4 de junio de 2010

Una pequeña (aunque provisional) presentación

Bueno, ¿por dónde empezar?
...

Por supuesto, presentándome un poco, ¿no?
Yo soy una chica, una chica llamada Júlia, que tiene 16 años de edad. Soy una chica con inquietudes y temores, con (muchas!) manías y rutinas supersticiosas (aunque, paradójicamente, no me considere una chica supersticiosa...). Una chica llena de molestos prejuicios pero con ganas de conocer, de saber más sobre este largo y misterioso camino que es la vida y de quedarme sin un solo interrogante!
Una chica que poco a poco irás conociendo, aunque cuando creas que ya me conoces completamente te darás cuenta de que realmente en ese instante aún te queda mucho por descubrir, como si de nuevo fuera para ti casi como una desconocida...



Y nada, que hoy me estreno con esto de los blogs. No sé si me gustará o si me volveré una adicta (como mi padre!), pero almenos lo probaré. Ya se dice, no se puede opinar sobre nada sin antes haberlo probado!

Aquí escribiré textos, frases, experiencias... Y todo aquello que se me pase por la cabeza. Seguramente también serán mías muchas de las fotos que cuelgue en él.
Es extraño.
Casi siempre he vivido guardándome todos mis pensamientos y historias para mí, sin que nadie las conozca, y parece ser que, a partir de hoy, voy a compartirlas!

Puede ser una experiencia realmente interesante...